Dones de Servicio






En la presente entrega del segmento cultura seguimos hablando de los dones servicio, en la anterior definimos la categoría de los dones en palabra, o que se manifiestan por medio de nuestro hablar. Esta vez hablaremos de dones más orientados hacia  la acción más que la expresión.

Servicio

Empecemos por hablar del don que define esta categoría, si bien sabemos que todos los dones están para el servicio del cuerpo de Cristo, el don como tal es más especifico.

La palabra diakonia usada en el griego, puede traducirse como servicio o ministerio, es decir que el don de servicio tiene que ver con la obra de suplir las necesidades de los demás.

En el puerto de Jope vivía una seguidora de Jesús llamada Tabitá. Su nombre griego era Dorcas, que significa «Gacela». Tabitá siempre servía a los demás y ayudaba mucho a los pobres. (Hch 9:36 BLS)

Un ejemplo que tenemos de este don es dorcas (Hechos 9:36-43) quien como dice el texto abundaba en toda buena obra. En otras palabras tener el don de servicio significa que Dios nos llama a suplir necesidades, tanto dentro como fuera del cuerpo de Cristo, en el caso de dorcas estaba enfocada en pobres, viudas, etc.

El don de servicio puede manifestarse supliendo necesidades, de personal, de organización y aun ayudando a los  que no tiene recursos financieros.

Repartir

Este don como el anterior, tiene que ver con los demás, pero está más orientado a dar, dar nuestro tiempo, esfuerzo y sí, aunque a algunos nos pese también nuestro dinero. Entre otras cosas que podemos aprender de dicho don en los capítulos 8 y 9 de 1 corintios es que la alegría es un elemento esencial en dicho don.

Muchos podrán pensar pero ¿Por qué debo dar a Dios, si él lo puede hacer todo? pero sería mejor preguntarnos, ¿Por qué no dar todo a Dios, cuando él es quien suple todas mis necesidades?

Cabe recordar que Dios nos llama primero a buscar su reino, a darnos para su causa, después de todo el añadirá todo lo demás (Mat 6:33).

Presidir

Cuando hablamos de este don, también podemos relacionarlo, con el don de administración. Así que en el sentido más amplio, el don de presidir o administrar, se refiere a ejercer autoridad sobre un determinado grupo de personas o recursos.

Una de las palabras, del original es kubernesis que denota conducción, pilotaje o gobernación. Como iglesia tenemos una cabeza que es Cristo, pero como humanos Dios mismo a dotado a muchos de sus hijos, para que nos presidan y ayuden a que seamos discípulos de Cristo más enfocados.

Misericordia

Dicho don se refiere a tener compasión es decir, a compadecerse del dolor de los demás. Como cuerpo de Cristo, estamos llamados a llorar con los que lloran y a dar una palabra de esperanza de parte de Dios a los demás.

Dios nos ha dado el don de servicio para bendecir a otros, el don repartir para darle a los que necesitan, el don de presidir, para que seamos guiados de forma organizada, pero también nos ha dado misericordia para que nos unamos a los que sufren les sirvamos en su necesidad de amor, les presidamos hacia la presencia del Dios de amor, les repartamos de lo que Dios nos ha dado y demos por gracia, lo que por gracia ya Dios nos dio.

Ruddy Reyes.

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